La verdad es que, si hay una muestra de que hay ratas en el edificio del Congreso en Washington, esa es Marco Rubio y su amigo el ex gobernador de Florida y ahora senador, Rick Scott. Rubio, es la típica representación de la escoria del pasado que produjo tantas muertes y arruinó tantas carreras durante el espionaje de la Guerra Fría. El pichón de idiota, tuvo las agallas de criticar al presiente de México, M A. López Obrador por la reunión del Celac en el país azteca, porque según él, no debieron haber participado en la misma los presidentes de Cuba y Venezuela. Él, y el otro idiota senador, Rick Scott, le escribieron al presidente de México una carta diciéndole, que “están decepcionados porque dejó participar a Cuba en el Celac y no arrestó al presidente de Venezuela Nicolás Maduro. Si a ver vamos, los que debían estar presos hace tiempo son ellos dos. El primero por mentir a la juventud de Florida hablando en contra de las matanzas y por detrás votando en contra del control de las armas. El segundo, porque como gobernador de La Florida, favoreció a todas las empresas de su propiedad, entre ellas las ligadas a la salud, por lo cual trató por todos los medios de hacer que los servicios de salud se mantengan privados y no se le de beneficios sociales a nadie. ¡Obviamente el Congreso necesita que lo fumiguen!
Señores, si los gobiernos de todos los países del mundo no le ponen freno a ciertos medios sociales, nuestros descendientes heredarán un mundo perdido en corrupción, violencia y pobres valores morales. La ambición de las redes sociales ha llegado a tal extremo, que FB está intentando captar la atención de los niños entre 10 12 años a quienes consideran un “excelente mercado”. Es decir, que los niños ya no aprenderán lo que se les enseña en las escuelas, sino lo que un idiota millonario cualquiera le de la gana para llenarse él los bolsillos.
Esta situación muestra claramente lo que siempre hemos dicho, que los medios deben ser fiscalizados, aunque eso conlleve a cierta pérdida de libertad. Es mejor estar limitados, que vivir en un mundo podrido de ignorancia, y que la gente actúe como borrego de ambiciosos e inescrupulosos millonarios.
Si no les ponen freno a los medios sociales, estos terminaran poniendo y quitando gobiernos cuando les da gana, y haciendo que la gente haga y actúe como ellos quieren.
Por otro lado, la Asociación Nacional de Juntas Escolares (NSBA, por sus siglas en inglés), pidió presidente Joe Biden que intervenga para poner fin a las amenazas y agresiones de padres que se oponen al uso de mascarillas en las escuelas. Según la carta enviada al manatario, en los estados de New Jersey, Illinois, Florida, Ohio y California, podres opuestos a las mascarillas (Léase seguidores de Trump) han hecho serias amenazas a los maestros y directores de distritos escolares. ¡Nada nuevo!
En el que condado de Kent esos (Trump followers) tienen al director de salud del condado de debajo de la cama con chaleco anti balas. Le han hecho toda clase de amenazas y hasta le tiraron un auto encima en una carretera.
Esta es la oportunidad para que el FBI demuestra que sirve para algo mejor que investigar chismes. La agencia debía tomar cartas en el asunto y perseguir a los que hacen las amenazas.
Esos “padres” debían ser puestos en observación, porque oponerse a que sus hijos estén protegidos del Covid, demuestra que no son buenos padres, que se interesan más en sus alocadas preferencias políticas que en la vida de sus hijos.
¡Hay muchos inocentes en las cárceles y demasiados sinvergüenzas en la calle!
Nos vemos en los próximos Jalapos, si la Virgencita lo permite.
